Democracia

El mundo está sufriendo profundos cambios políticos, económicos y sociales y, como no ha sucedido nunca, “en todo el mundo, a la vez, sin pausa, de forma acelerada y en todas las esferas de la vida social están sucediendo.

La globalización y sus condiciones de desarrollo plantean una nueva agenda política. Además, el actual modelo de globalización supera y debilita el marco del Estado nacional y, con ello, también la democracia. El Estado no está solo en crisis espacial, también está en crisis de su identidad; por un lado, las estructuras políticas no controlan la realidad económica y social, y, por otro, se está produciendo una profunda transformación de la personalidad política de los ciudadanos, lo que condiciona la realidad de las estructuras políticas de las democracias representativas.